En el post de hoy, queremos que “visites” los 7 pueblos más desconocidos de Uribe ¡te sorprenderán! 

Berango:  Esta localidad se encuentra a caballo entre una zona de suaves colinas con los montes Munarrikolanda, Saiherri y Agirremendi, y otra más llana y abierta surcada en parte por el río Gobela. Está muy bien comunicada con Bilbao y con municipios costeros cercanos. 

¡Berango está lleno de historia! Los hallazgos arqueológicos realizados en el municipio atestiguan la ocupación humana al menos desde hace unos 40 000 años y se han hallado útiles de pedernal y túmulos funerarios en Munarrikolanda de hace unos 3000 o 4000 años. Por otro lado, tendrás la oportunidad de descubrir vestigios de la Guerra Civil y visitar el museo memorial del cinturón de hierro con audioguía gratuita.

Otro punto fuerte de esta localidad es el ambiente que se vive en sus múltiples fiestas y eventos culturales como la conocida Pasión Viviente de Berango, la única íntegramente nocturna de Bizkaia, o la “Bacalada de Berango” un veterano concurso gastronómico de bacalao al pil-pil. Suena bien, ¿verdad?

Derio: ¿Es posible combinar naturaleza y ciencia? En Derio sí lo es. Y no sólo eso, Derio es también espacios rurales, innovación, tecnología…y todo concentrado en el mayor núcleo del valle del Txorierri. 

Cabe destacar su histórica tradición educativa que continúa presente, siendo el Antiguo Seminario de Derio un importante referente multifuncional para toda la comarca.

Se trata de un municipio con una clara vocación agrícola que podemos ver reflejada en su antiguo núcleo histórico, situado en torno a la Iglesia de San Cristóbal. Este ambiente rural está salpicado por prados, pequeños viñedos, invernaderos y huertas… 

A medida que te “pierdas” entre sus calles, te sorprenderá toparte con el Parque Tecnológico de Bizkaia, un espacio abierto, lleno de senderos, donde podrás disfrutar de naturaleza y, porqué no, de degustar una exquisita gastronomía entre sus restaurantes.

Derio cuenta con un extenso patrimonio monumental:  La Iglesia de San Isidro (1958) de estilo neorromántico, la Ermita de San Esteban construida en el siglo XVIII, el Ayuntamiento en estilo neovasco… ¡y mucho más! 

Laukiz: Es un municipio con un entorno natural privilegiado y marcado por una larga tradición agrícola y ganadera. Cuenta con un importante conjunto de patrimonio artístico, entre el que destaca el edificio del actual ayuntamiento que es donde nació uno de los personajes más ilustres de la cultura en Euskal Herria, el escritor y poeta Esteban Urkiaga, “Lauaxeta”.

Si te acercas a Laukiz, te recomendamos moverte por sus alrededores, ya que son un excelente mirador donde contemplar impresionantes panorámicas. Tal es el caso del Monte Unbe, donde además de las vistas podrás visitar su santuario y el manantial que se localiza junto a él, que según dicen tiene propiedades sanatorias.

Otro de sus platos fuertes es la gastronomía donde el producto local y la tradición son dos de sus principales ingredientes, destacando sus afamadas alubias.

También cuenta con un amplio patrimonio monumental,  como la Iglesia de San Martín o el santuario de Unbe entre otros. 

Leioa: Su historia está unida, al igual que la de muchos pueblos de Uribe, a la Guerra de Bandos entre linajes de Bizkaia. De carácter polifacético, además de la agricultura y ganadería tradicionales, también se desarrollaron actividades como la pesca, el transporte en gabarras, los molinos del Gobela, las ferrerías, la producción de carbón vegetal o la construcción de edificios.

La industrialización en los años 60 es una de sus señas de identidad que han hecho de este municipio un lugar en constante desarrollo. Cuenta también con una amplia oferta cultural y ocio, donde destacan las fiestas patronales como Umore Azoka, la Maskarada de Lamiako o la noche de las hogueras de San Juan en Elexalde.

En cuanto a su patrimonio monumental, podrás visitar los templos de San Juan Bautista y San Máximo, la Ermita de Andra Mari en Ondiz y Ermita de San Bartolomé (S. XVI) Casas-torre de Altzaga y Ondiz (S. XVI), y el palacio Artaza, entre otros. 

Loiu: En 1966, Loiu fue anexionado a Bilbao junto con los municipios de Erandio, Sondika, Zamudio y Derio y es en 1982 cuando vuelve a ser municipio independiente. 

Cuenta con un pasado 100% rural y es muy conocido por disponer del único aeropuerto de Bizkaia. Loiu te abre sus puertas a la historia, a la cultura, al ocio y también a un gran patrimonio cultural: iglesias, ermitas, molinos, palacios, casas rurales…¡No te pierdas el paseo que recorre todo el municipio!

Sondika: Es un municipio del Valle del Txorierri rodeado de un bello entorno natural con muchísimas posibilidades de ocio y disfrute. Puedes disfrutar de un agradable paseo entre sus calles o subir a Artxanda, un mirador con vistas impresionantes.

Si te acompaña el buen tiempo en tu visita, te recomendamos ir a conocer el parque de Larrabarrena, un lugar que cuenta con amplias zonas verdes y equipado para toda la familia (zona de juegos, “pic-nic”).

En noviembre se celebra la feria agrícola y de artesana donde disfrutar de productos de la zona, artesanía, exhibición de actividades relacionadas con el campo…con actividades para todos los públicos.

Si eres amante del vino, en octubre no puedes dejar de acercarte a Sondika ya que se “Enologia Eguna” una interesante feria enológica donde se dan cita las mejores denominaciones de origen.

En cuanto a su patrimonio monumental, destacamos el molino de Viento de Artxanda (1725), la Ermita de la Santa Cruz de Goiri y el puente de Sangroniz. 

Urduliz: Proviene de un marcado carácter rural. En el pasado, se cosechaba trigo, maíz, alubias, y uva para la elaboración de txakoli. Hoy en día, aunque en menor medida, el sector agrario sigue presente en el municipio a través de cultivos tradicionales y los productos hortícolas.

Es un destino ideal si lo que quieres es disfrutar de tranquilos paseos o una ruta en bicicleta. Por otro lado, si lo tuyo es la escalada o estás pensando en probar, la zona de las Peñas de Santa Marina es el lugar perfecto para hacerlo.

En Urduliz también podrás conocer el deporte rural de primera mano: las pruebas de bueyes son una gran tradición en la localidad. Respecto a su patrimonio monumental, podrás visitar la Iglesia de Andra Mari, una parroquia renacentista, edificada en el s. XVI y rehecha en el s. XVIII o el Palacio Torre Barri, un edificio palaciego construido en el s. XVII sobre una anterior torre-fuerte de uso castrense. 

¡Y todo ello conectado por el Metro!